La emulación de los procesos de la superficie terrestre en el modelo, que incluye la evolución de las condiciones de humedad del suelo, a menudo sufre debido a ciertos sesgos y errores sistemáticos del modelo que pueden producir retroalimentaciones las cuales, a su vez, agudizan el sesgo original. Si bien tales retroalimentaciones pueden tener poca importancia cuando la dinámica del modelo es fuerte y el forzamiento físico es débil (por ejemplo, durante el invierno), se vuelven muy importantes cuando la física del modelo domina sobre la dinámica. A modo de ejemplo para comprender cómo funcionan estos efectos de retroalimentación, supongamos que un sesgo positivo y sistémico en la precipitación del modelo ocasiona la humectación excesiva de los suelos de una región.
Este ejemplo muestra la interconexión de las componentes de física del modelo y la reacción en cadena que provocan los errores de pronóstico. Como veremos a lo largo de la lección, los pronósticos del tiempo sensible pueden verse afectados por diferencias relativamente pequeñas en las condiciones en la superficie y la atmósfera y las técnicas de emulación empleadas.